Cuidado con tus oídos

La biblia dice que Romanos 10:17 Reina-Valera 1960 17” Así que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios”.  “La gente chismosa revela los secretos; la gente confiable es discreta”. Proverbios 11:13

Yo me cuido mucho de lo que escribo para no crear controversias, pero en esta ocasión he sentido una profunda necesidad de exponer este tema.  En lo que se conoce como mundo secular la gente se tira, ofende, levantan mentiras de las personas y pudiéramos decir que es normal pues viven sin Dios.  En el mundo cristiano esto es alarmante ya que el mismo pueblo se ataca sin medidas llevándose por el medio la integridad y testimonio de las personas.

Todos tenemos un pasado tal vez no sea el mejor o tal vez no te enorgullezca del mismo, pero no deja de ser pasado, los cristianos viven buscan trapos viejos para tirarlos al presente sin pensar que lastiman no solo a las personas si no al cuerpo de Cristo.  Esto se pone peor pues se levanta gente a difamar, ¿Qué es difamar? La definición varía en todo el mundo, aunque, en general, la difamación es toda afirmación no verdadera que daña la reputación de alguien o que provoca que una persona sea evitada o rechazada. Es terrible este mal pues está afectando el cuerpo de Cristo.  Queremos que la gente llegue, pero nos esforzamos por sacar hacia fuera.

Siempre el enemigo va a tacar cuando sabe el potencial del árbol, siempre va a tratar de impedir que se lleve a cabo el propósito por el cual Dios te escogió, lo hace a través de las difamaciones, murmuraciones y chismes.  Esto duele, pero si vamos a seguir a Cristo debemos de entender que el paso lo mismo.  No dejo su propósito tirado y cumplió con todo y amo a pesar de lo que los demás decían del. Cuando se comienza el chisme y la difamación estas siendo participe de pecado y se te olvida que también tienes historia que se podría utilizar en contra.  Las personas hoy por hoy no desarrollan discernimiento y esto los llega a creer cualquier viento negativo como verdad.  Hay que usar el discernimiento , el espíritu de Dios da testimonio.

No debemos impacientarnos por el que se levanta chismeando o difamando pues Dios es nuestro abogado nos defiende.  Cuando alguien habla mentiras o repite sin verificar la información no es el espíritu de Dios quien esta dirigiendo a esa persona, es el enemigo.  La biblia relata que los hermanos de Moisés comenzaron a murmurar y María recibió lepra. Números 12 :1-4-9-10 María y Aarón hablaron contra Moisés a causa de la mujer cusita que había tomado, porque él había tomado por mujer a una cusita. 2 Ellos dijeron: —¿Acaso solo por medio de Moisés ha hablado el SEÑOR? ¿No ha hablado también por medio de nosotros? Y lo oyó el SEÑOR. 3 Moisés era un hombre muy manso, más manso que todos los hombres que había sobre la faz de la tierra. 4 Repentinamente el SEÑOR dijo a Moisés, a Aarón y a María: 9 Entonces el furor del SEÑOR se encendió contra ellos. Y se fue. 10 cuando la nube se apartó de encima del tabernáculo, he aquí que María quedó leprosa, blanca como la nieve. Aarón se volvió hacia María, y he aquí que estaba leprosa. Dios hace justicia.

Las personas con espíritu pobre (no de dinero) si no de valores, falta de conocer a Dios y por vacíos emocionales actúan de esa manera.  Lo increíble esta que otras personas se presten para este tipo de actividad, difamar o criticar a un hombre o mujer de Dios. La santidad no permiso a herir a las personas, por el hecho de tu no entender el trato de Dios con las personas no quiere decir que tu tienes derecho a criticar, hablar o peor aún difamar.

El que presta oído al que difama no pienses que no te lo hará a ti hoy serien contigo mañana serás de quien hablen.  Detengamos esta cadena de dolor. Si la gente tuviera los pantalones que luego de decir cosas incorrectas de alguien se pudiera retractar públicamente, así como hizo el daño resarcir el mismo seria de valientes.

Cuando prestamos nuestros oídos a esta actividad traemos consecuencias que son inevitables:

1.      Nos hacemos cómplices

2.      Nos abrimos a la duda

3.      Dios traerá juicio como María y Aaron

4.      Puedes experimentar estancamiento en las diferentes áreas de la vida.

5.      Tu cuerpo podrá ser afectado en la salud.

6.      Podríamos caer en juzgar a las personas.

Como cuidarnos de esto: coalicionporelevangelio.org/articulo/cuidandonos-del-chisme/ crédito de esta informacion

1.      Reconocer el chisme como pecado y no excusarnos.

2.      Pedir perdón a Dios por este pecado concreto en nuestras vidas.

3.      Poner guardas a nuestra boca: pedir en oración a Dios de manera constante, como lo hizo David, “Pon guarda a mi boca, oh Señor; guarda la puerta de mis labios” (Salmo 141:3).

4.      Preguntarnos si lo que vamos a decir es realmente necesario que se diga. Si no lo es, callar.

5.      Lo que voy a contar de alguien, ¿estaría dispuesto a escribirlo y firmarlo con mi nombre?

6.      Hablemos para edificar: Efesios 4:29, “No salga de la boca de ustedes ninguna palabra mala (corrompida), sino sólo la que sea buena para edificación, según la necesidad del momento, para que imparta gracia a los que escuchan”. ¿Serán beneficiados los que me escuchen con lo que voy a decir?

Si has sido víctima de difamación no te defiendas ni trates de buscar maneras sutiles para que tu versión sea escuchada todo aquel que tiene el espíritu de Dios podrá discernir quién eres en Cristo.  No te defiendas tu mayor fortaleza es quedarte quieto.  Dios contigo quien contra ti.

Bendiciones

Neida Velazquez